El Consejo de Administración de la Sociedad Municipal Ecociudad Zaragoza ha aprobado requerir a la empresa Drace, actual gestora de la depuradora de la Almozara y de la planta de fangos de la potabilizadora, para que continúe prestando el servicio con normalidad a partir del 1 de abril hasta que se vuelvan a licitar estas infraestructuras. Esta situación de provisionalidad no deberá superar el plazo de once meses.
La propuesta, que han presentado los socialistas “por responsabilidad” en el Consejo de Administración, se ha aprobado por unanimidad y favorece “ el nomal mantenimiento de la ciudad y la defensa de los puestos de trabajo de los dos equipamientos municipales”, explicó la concejala del PSOE Lola Ranera.
La empresa Drace, que gestiona la estación depuradora de La Almozara y la planta de fangos, termina su contrato con el Ayuntamiento de Zaragoza mañana, 31 de marzo, pero el pasado mes de diciembre manifestó su deseo de no continuar con el contrato de servicio “ ni un día más” después de las tensiones y desencuentros surgidos tanto con el Consejero de Servicios Públicos, Alberto Cubero, como con la vicepresidenta de Ecociudad, la concejala Teresa Artigas.
El PSOE advirtió al equipo de Gobierno de la gravedad de la situación creada, ya que tomaba cuerpo la posibilidad de que el 1 de abril Drace se retirara del servicio, cerrando la planta de La Almozara y despidiendo a los trabajadores, puesto que no se había tomado ninguna decision de futuro sobre la gestión de este servicio, imprescindible para la ciudad.
El Consejo de Administración celebrado hoy ha ratificado el acuerdo alcanzado en la última sesión para que Ecociudad redacte, en el plazo de un mes, unos nuevos pliegos de condiciones con los que sacar a licitación la gestión de las dos infraestructuras, a la vez que ha aprobado requerir a Drace para que “continúe con la prestación del servicio para la asistencia material de las tareas incluidas en la operativa diaria de las plantas”, hasta que se realice un nuevo concurso. No obstante, la actual adjudicataria deberá asumir este encargo con las mismas condiciones que rigen en el contrato original, desestimando por lo tanto su pretensión de obtener nuevos encargos de inversión por valor de 140.000 euros.
En este sentido, se especifica que las inversiones que sean necesarias en el periodo que resta hasta el nuevo concurso se harán en función de lo que señalan los informes técnicos de Ecociudad Zaragoza que deberán sacarse, a su vez, a licitación.
Lola Ranera aseguró que los acuerdos alcanzados hoy en el Consejo de Administración “salvan in extremis una situación anómala y preocupante que había surgido por la falta de gestión y de toma de decisiones del equipo de Gobierno”. De la misma manera explicó que este problema se ha visto favorecido por la intención de ZeC de conseguir “a toda costa y a cualquier precio” la municipalización de este servicio, que hubiera sido el primero en pasar a la gestión directa. Sin embargo, los informes técnicos, económicos y jurídicos con los que se cuenta hasta este momento han desaconsejado avanzar por ese camino.