El ciudadano castiga la decisión de Participación Ciudadana de excluir de la votación el 50% de las obras propuestas por los vecinos en la primera fase del proceso
Zaragoza, 11 de Julio de 2018 – El descenso de participación que se ha registrado en la votación de la segunda edición de los presupuestos participativos (casi 5.500 sufragios frente a los 6.135 del año pasado) confirma el descalabro de una iniciativa que ha pinchado en la gestión.
Los vecinos han castigado la decisión del área que preside la consejera de ZeC Elena Giner de desestimar en la fase de valoración técnica casi el 50% de las iniciativas propuestas por los ciudadanos en la primera fase del proceso. Ni la campaña de difusión de esta consulta ni el esfuerzo realizado llevando urnas móviles a distintas sedes municipales o a enclaves tan dispares como las piscinas de mayor afluencia y la Cicleria han logrado salvar esta consulta a la que los vecinos le han vuelto la espalda.
El portavoz de Participación Ciudadana del PSOE, Roberto Fernández, ya propuso a Giner retrasar la votación de las propuestas hasta septiembre, y hacerlas coincidir con los proyectos de ciudad y de barrios rurales, para tratar de repescar el mayor número posible de propuestas desestimadas en la valoración técnica. Fernández consideró que rechazar un porcentaje tan abultado era desvirtuar las pretensiones de los vecinos y sobre todo, dijo el concejal socialista, se corría el riesgo de generar “frustración y decepción” en los ciudadanos, que lejos de consolidar esta iniciativa la hicieran inservible e invisible.
Los números son claros, en la fase de presentación de propuestas votaron cerca de 12.000 personas que se interesaron por aportar ideas. Unos meses después, y una vez que el Gobierno depuró el 50% de esas ideas, han votado sólo la mitad de los interesados, es decir 5.500 vecinos. Es decir, se ha pasado de un porcentaje pírrico en 2017 del 1,07% de participación a un 0,966% en el 2018.
Es llamativo además el bajo nivel de voto presencial en las juntas de distrito, con cómputos tan mínimos como una persona en Santa Isabel o 7 en el Rabal, que solo superan el umbral de los cien, curiosamente, en los distritos presididos por concejales de ZeC, aunque en alguno de ellos registran caídas significativas respecto a 2017.
El PSOE lamenta “el descalabro, el fracaso y la falta de credibilidad” de ZeC también en las cuestiones de participación y se reafirma en la necesidad de cambiar la gestión y la planificación de un proceso que Giner ha dejado “herido de muerte”.