Zaragoza, 15 de abril de 2024.- El concejal socialista Horacio Royo ha considerado que la alcaldesa de Zaragoza, Natalia Chueca, “debe dar máximas explicaciones y despejar cualquier sombra de duda” al superar, con total probabilidad, los 180 millones de euros el coste de la nueva Romareda; un proyecto que, ha recordado, fue “vendido” por el PP a “coste cero” en campaña electoral y que, por ahora, “está inmerso en un oscurantismo alarmante por no decir que está plagado de mentiras”.
En la Comisión de Urbanismo celebrada hoy, Horacio Royo ha lamentado que el consejero Víctor Serrano “base de nuevo sus intervenciones sobre lo que nos va a costar la Romareda en un ataque al PSOE, cuando siempre hemos dicho estamos a favor de que Zaragoza cuente con un nuevo campo. Con una evidente falta de rigor y un oscurantismo alarmante quiere intentar desviar la atención a base de mentiras, para no hablar de que el coste real. Y es que, si se incluyen las demoliciones, vamos a superar con seguridad los 210 millones, algo que también pone en tela de juicio los estudios de viabilidad”.
Concretamente, Royo ha explicado que en la presentación del proyecto básico, se puede ver cómo el apartado demoliciones se valora en 3.185.000 euros, “aunque luego lo ocultaron a la prensa” y, además, se ha sacado a licitación el derribo del graderío sur por un importe 5 millones. “Una simple extrapolación al conjunto de las gradas que han de ser demolidas nos llevaría a un coste mínimo en torno a 25 millones de euros”, ha denunciado. A todo ello, habría que añadir la construcción de un nuevo estadio auxiliar durante las obras, que supondría superar ampliamente los 210 millones, más del 50% de desviación sobre el coste previsto.
Ha añadido que “todo esto tira por tierra los estudios que sustentaron tanto la modificación del PGOU como la propia constitución de la sociedad y lo que es más grave, comprometen una captación de financiación que ahora mismo tiene que ser ya muchísimo más elevada”.
En este sentido, ha explicado que “sobre 140 millones, Nueva Romareda tenía que captar en torno a 50 millones de deuda, teniendo en cuenta que unos 30 millones de las aportaciones de capital eran en especie, como el suelo o el valor de los proyectos. Pero con las cifras que hoy conocemos a través de los medios de comunicación, si no se producen aportaciones extraordinarias, la deuda necesaria será al menos de 120 millones de euros”.
Por todo ello, Horacio Royo ha incidido en que “estamos ante un proyecto que, antes de arrancar, suscita ya tantas dudas que es imprescindible poner las cartas sobre la mesa y analizar con rigor los riesgos a los que enfrentamos”.