La coalición de derechas vuelve mostrar su cara más autoritaria al no contar con la oposición para tomar una decisión tan importante para la ciudad como la renuncia a la línea 2 del tranvía, que conectaría la ciudad de este a oeste.
Zaragoza, 12 de agosto de 2019.- El PSOE censura el miedo del gobierno del PP a gestionar la ciudad y pide un debate sosegado sobre movilidad. La coalición de derechas vuelve mostrar su cara más autoritaria al no contar con la oposición para tomar una decisión tan importante para la ciudad como la renuncia a la línea 2 del tranvía, que conectaría la ciudad de este a oeste.
Las últimas declaraciones en medios del equipo de gobierno, sumadas a su negativa a defender los intereses de la ciudad en los procesos judiciales o a su incapacidad de sacar adelante un presupuesto, manifiestan su miedo a gestionar la ciudad. Renunciar a la segunda línea del tranvía supone abandonar un proyecto de más de 5 años con el que se pretendía conectar los barrios de este a oeste con el centro, dando respuesta a un déficit claro de conexión y movilidad de los barrios zaragozanos situados en estos puntos. También se sufrirá la pérdida de más de un millón de euros invertidos en estudios de viabilidad y una subvención europea para el estudio de conexión de la línea con la intermodal de Delicias, valorado en 700.000 euros. Este carpetazo se realiza antes de obtener todos los estudios de viabilidad, anteproyecto y proyecto, previstos para diciembre de este año, sin intentar buscar otras vías de financiación.
Ante esta decisión los socialistas zaragozanos volvemos a denunciar la guerra ideológica que proyecta el Partido Popular en materia de movilidad, adjudicando bandos políticos a los defensores del tranvía, bus o las nuevas modalidades de movilidad personal. Para el PSOE la movilidad es intermodal y por lo tanto no entiende de colores políticos. Es una herramienta fundamental para crear un proyecto de ciudad potente, que mire al futuro, convirtiendo Zaragoza en una ciudad del siglo XXI. Para el PSOE este proyecto debe alejarse del partidismo, afianzándose sobre el consenso de los diferentes partidos políticos del consistorio zaragozano.
Desde el Grupo Municipal Socialista de Zaragoza exigimos un debate sosegado sobre movilidad, que cuente con la ciudadanía, expertos y partidos políticos, en los espacios de debate y encuentro propios del Ayuntamiento como la próxima comisión de Servicios Públicos y Movilidad. Queremos que esta inactividad termine y se busquen nuevas vías de actuación y financiación, siempre buscando el bien de la ciudad. La quinta ciudad de España no puede permitirse un Gobierno del “no hacer”. También pedimos que el equipo de gobierno deponga esta costumbre de “hechos consumados” a través de los medios de comunicación en vez de los cauces municipales. Esta actitud dista con lo manifestado durante el primer pleno municipal, en el que Jorge Azcón se comprometió a que una decisión de este calado se tomaría con acuerdos y diálogo.
