El PSOE se volcará para que los seis trabajadores de la Sociedad Zaragoza Desarrollo Expo se integren en otros servicios del Ayuntamiento de Zaragoza como trabajadores municipales de pleno derecho que son. Esta determinación se produce tras la junta de la sociedad que ha constatado la disolución de la misma y en medio de una espantada de ZeC que, tras los acuerdos alcanzados en otras sesiones, dice ahora que no quiere participar en los trabajos de liquidación de la misma.
La Sociedad municipal Zaragoza Desarrollo Expo se puso en marcha en 2009 para gestionar el periodo de la postexpo que siguió al fin de la cita internacional. Ahora, 8 años después de aquel evento, se entiende que el objetivo está cumplido y que no tiene sentido que haya sociedades que dupliquen labores, ya que los servicios que hay en marcha en el recinto de Ranillas se pueden asumir con normalidad por las distintas áreas municipales.
Este acuerdo mayoritario avanzó a medida que se organizaba la disolución de la sociedad, hasta el punto de que se decidió que la liquidación de este órgano se llevaría de manera colegiada, de manera, que el gobierno y la oposición trabajarían juntos. El objetivo último de esta búsqueda de la unanimidad era favorecer la reorganización de los servicios y del personal.
Sin embargo, hoy con una “irresponsabilidad sin precedentes”, el vicepresidente de la sociedad y consejero de Economía, Fernando Rivarés, ha decidido quedarse al margen del órgano liquidador, incumpliendo las obligaciones que tiene como Gobierno, explicó el concejal de Economía del PSOE, Javier Trívez.
El concejal socialista aseguró que desde el PSOE “lucharemos para que se subroguen los trabajadores de la sociedad”, que son trabajadores municipales, ya que accedieron a su puesto de trabajo mediante el correspondiente concurso. “Si hay algún problema que impide la incorporación normal de los trabajadores a otros servicios, el único responsable será el Gobierno de ZeC.
Trívez censuró “la utilización espuria” de los trabajadores y las dudosas maniobras del consejero de Economía, Fernando Rivarés, para obstaculizar los acuerdos en los que previamente tomó parte, como lo demuestra su voto en contra de las cuentas de la sociedad, que ha forzado una rectificación de la votación, ya que sin el respaldo a las cuentas no se puede liquidar una sociedad que ha cumplido su objetivo con éxito y que hoy por hoy, sólo genera duplicidad de servicios en la estructuras municipal.