La pérdida de 4 millones de usuarios (solo en días laborables) del bus público desde que comenzó la huelga el 10 de diciembre de 2015 son datos de vértigo y de irresponsabilidad. Los datos que ha aportado la concejala de Movilidad, Teresa Artigas, a una pregunta de la concejala del PSOE Lola Ranera, reflejan “una verdadera “caída libre” del servicio público y una “deconstrucción” del mismo.
La concejala socialista aseguró que el Ayuntamiento de Zaragoza “no se merece los ciudadanos que tiene”, ya que han aguantado con verdadero estoicismo y con verdadera paciencia este conflicto en el que el equipo de Gobierno de Zaragoza en Común, ha mirado para otro lado, “esperando que alguien parara la huelga”. Ranera señaló que la pérdida de 60.000 usuarios al día es una noticia muy grave, “da vértigo” y afecta a un servicio público que es esencial y que tradicionalmente tenía una buena valoración de la ciudadanía.
Ranera añadió que la huelga que ZeC ha permitido que caminara “descontrolada” y “enquistada por su torpe gestión”, supone una amenaza a la movilidad en esta ciudad y al trabajo de muchos años para favorecer el uso del transporte público por encima del coche privado, “pero la pérdida de 4 millones de usuarios retrotrae ese trabajo a muchos años atrás”.
La concejala socialista dijo además que no entiende a la concejala de Movilidad, Teresa, Artigas, cuando pese a este panorama asegura que está velando por la ciudadanía. “ Yo no la entiendo, ni tampoco las personas que día a día esperan en largas filas en las paradas del bus durante las seis horas de huelga. Que haga si quiere una asamblea con los casi 700.000 habitantes para que le digan si cree que ha atendido al interés general”.
Tras expresar su deseo de que el conflicto termine pronto, que no cumpla los cien días y que se resarza a los usuarios que utilizan abonos de transporte, ha explicado que en estos días de paros el Gobierno que preside Santisteve ha escrito un decálogo de las actuaciones que convierten un “conflicto difícil en endemoniado”.
Y mientras continúa la huelga del bus, ha recordado Ranera, sigue paralizada la revisión del Plan Sostenible de Movilidad, el estudio de la segunda línea de tranvía y la señaletica de bicicletas en el Casco Histórico, que demuestra cómo el día a día “ha rebasado” a Artigas.
Precisamente a este respecto, Ranera ha preguntado al Gobierno sobre su disposición a cumplir una moción aprobada en Pleno en el mes de octubre para revisar las señales que deben garantizar la ciclabilidad en las vías peatonales. Ranera recordó que en aquella moción se encargó al Gobierno que fuera sensible con las peticiones de otros grupos y colectivos, como los que advierten del problema que supone la circulación de bicicletas para los invidentes y las personas de movilidad reducida en las plazas públicas. Ranera ha propuesto que se prohíba la presencia de las bicis en estos entornos y se busque una alternativa que permita su tránsito sin alterar los derechos y las posibilidades de los colectivos más desfavorecidos.