Incorpora actuaciones que contradicen otros supuestos proyectos de ZeC en materia de movilidad y evidencia la falta de una idea de ciudad integradora
El Plan Integral del barrio de San José se ha convertido en papel mojado desde el minuto uno de su presentación, no solo porque no cuenta con las partidas presupuestarias necesarias para hacerlo realidad, sino porque sus proyectos entran en colisión con otras actuaciones que ya ha anunciado el Gobierno de ZeC en ese entorno, principalmente en materia de movilidad urbana.
El PSOE es muy crítico con este plan que solo se soporta en papel, ya que no se presenta acompañado de la dotación económica que permita pasar del plano de las ideas al de los hechos. De la misma manera se censura la presentación demagógica que se ha llevado a cabo a los vecinos en la Harinera. Los vocales socialistas en San José ya han anunciado que propiciarán un debate en profundidad en la Junta de Distrito durante una próxima sesión plenaria extraordinaria y monográfica.
Además, la propuesta con más peso de este plan se centra en la reforma de Cesáreo Alierta que se antoja imposible no solo por la falta de presupuesto para plantearla, sino porque se propone sin que haya una alternativa viaria a esta vía colectora de gran magnitud. De hecho, el Gobierno de ZeC ha sido incapaz de materializar la prolongación de Tenor Fleta, que contaba con las partidas introducidas en el presupuesto por los socialistas.
Tampoco parece lógica la intención de reformar San José sin garantizar la realización de la línea 2 del tranvía. Por no citar el olvido de la calle Miguel Servet, en el límite de dos barrios, que espera una rehabilitación que permita impulsar San José y Las Fuentes
La opción que defiende ZeC de actuar por barrios con un instrumento como el plan integral traduce sus acciones en iniciativas inconexas, que llevan a la ciudad a asumir aberraciones de planificación, ya que se pierde el concepto de unidad y la suma de sinergias y, en cambio, se favorecen las incongruencias de las acciones atomizadas.
El arreglo de la ciudad, su mantenimiento y su transformación es vital para Zaragoza y para la calidad de vida de sus habitantes, pero el plan de barrio de San José parece más la elaboración de una propuesta atractiva para un futuro programa electoral de los comunes que una acción de Gobierno, ya que no estaba en su hoja de ruta para este mandato. Pero si ZeC quería una acción tasada, valorada y trabajada para revitalizar barrios, el Gobierno de Zaragoza en Común bien podía haber puesto encima de la mesa el plan de la orla este, que propiciaría un cierre digno a los barrios del este de la ciudad.
La decisión de ZeC no pasa del plano teórico y aún así revela la falta de ambición de su acción política y la generación de tensiones entre los barrios de la ciudad.