El documento tiene una parte presupuestaria que es “un insulto a la inteligencia”, ya que incluye el arreglo de piscinas y la compra de instrumentos musicales, pero no reserva partidas para los nuevos problemas de niños y adolescentes
El Plan Municipal contra la Pobreza Infantil no es un documento novedoso, ni real ni está conectado con los recursos autonómicos y nacionales. Así lo ha expresado la concejala socialista Lola Campos, que se ha abstenido en la votación de esta iniciativa en la Comisión de Derechos Sociales del Ayuntamiento.
Campos señaló que el documento ordena los recursos existentes en la ciudad, tras la corrección del primer texto, pero no deja de ser “un sumatorio” de recursos que ya están en marcha. Sin embargo, no marca los pasos a dar ni incluye ninguna acción que permita abordar el problema “con más ambición y amplitud de miras”.
El documento se invalida desde su concepción bianual, ya que aunque no se ha aprobado todavía, teóricamente planifica 2017 y 2018. Por lo tanto, solo deja un año de desarrollo con el agravante de que no tiene dotación económica, y que el presupuesto de 2018, se negocia sobre un borrador cerrado de manera unilateral por el Gobierno de ZeC.
Sin duda ha sido la parte económica la más credibilidad ha restado al documento. La socialista Lola Campos señaló que es un “insulto a la inteligencia”, ya que arman el plan incluyendo en el mismo partidas tan dispares y variopintas como la reparación del espacio joven el Túnel, la conservación y mantenimiento de instalaciones deportivas, la remodelación de piscinas de verano o la renovación de instrumentos musicales, entre otras.
Sin embargo, no hay aumento en las partidas de chabolismo, de lucha contra las adicciones o para atender los nuevos problemas de la infancia y de la adolescencia.
Campos insistió en “dar una vuelta” a este texto y recomendó atender las demandas de las entidades sociales con las que se ha hablado, que le piden más eficacia y coordinación de recursos.
La socialista aseguró no oponerse a un plan específico contra la pobreza infantil, pero recordó que “la medida más eficaz pasa por impulsar un plan de empleo”, que los socialistas han reclamado en diversas ocasiones, ya que ataca al problema de la pobreza desde la raíz, y evita que la labor de Acción Social se oriente “al asistencialismo puro y duro”.
Lola Campos también fue muy crítica con el Plan de Empleo que no existe como tal, dijo, y hubiera servido para coordinar otras iniciativas, como el Plan de Turismo, el de Comercio, Igualdad y el Plan Joven, que podrían ser una red de empleo. A pesar de ser una necesidad imperiosa, no hay novedades, ni ambición y sobre todo se apuesta en exclusiva por iniciativas que, aunque deben tenerse en cuenta, comola economía social, no cambian el sistema productivo, ni lo reactivan por si solas.