Las concejalas socialistas de Derechos Sociales y Servicios Públicos destacan el número de partidas que se arrastran de otros años por falta de voluntad en la ejecución o por mala gestión
“Es un presupuesto, cerrado, cautivo y un trágala”. De esta manera, la concejala de Derechos Sociales del PSOE, Lola Campos, valoró el documento de presupuestos del área para 2018 que ZeC defendió en Comisión.
Campos negó las excelencias que la consejera titular del área, Luisa Broto, trató de atribuir al presupuesto, que incluye de manera reiterada actuaciones que se arrastran de ejercicios anteriores, como el cambio de césped de los campos de fútbol, o la realización de obras en los centros sociales.
La concejala socialista fue especialmente crítica con las ayudas de urgencia, que en 2018 tienen previsto incrementarse en 400.000 euros, pese a que el Gobierno la definió en el anterior presupuesto como una partida correctamente dimensionada. “Si el equipo que iba a terminar con la emergencia social se ve obligado a seguir incrementando una partida correctamente dotada, entonces estamos siendo poco eficaces, porque cada año le inyectamos más dinero”, dijo Campos.
La edil socialista recordó que el Plan de Empleo, “ no está ni se le espera”, pese a cuatro partidas de poca significación que se han metido, como tampoco saldrá adelante el programa de Vuelta del talento, pese a que funcionaba bien, ni el Plan de Comercio, el de Igualdad o el de Juventud, aunque quizá estos últimos algún día vean la luz.
Pero sin duda, las actuaciones más cuestionadas fueron las que tiene que ver con Vivienda, ya que “en la vida se ha contado con tanto dinero y se ha traducido en tan pocas realizaciones”, dijo Lola Campos. En este sentido, recordó cómo se han recortado las expectativas del programa de alquiler Alegra tu vivienda, al que se han destinado 2 millones de euros y ha conseguido 115 pisos nuevos en un año y medio largo. “No sé si buscan los pisos con el FBI o con la KGB”, apostilló.
Campos concluyó resaltando la mayor opacidad de este presupuesto que está dotado de algunas grandes partidas, donde las acciones concretas se pierden en función del interés de cada momento.
Por su parte, en las explicaciones del presupuesto correspondiente al área de Servicios Públicos, la concejala socialista, Marta Aparicio, destacó “la poca confianza” que le inspira el titular del área, Alberto Cubero, del que esperaba este año unas cifras expansivas que le permitieran hacer “la revolución, pero todo se reduce a diez partidas nuevas, dotadas con 500.000 euros”, aunque, añadió, se ha asegurado partidas de 200.000 euros por si necesita algún informe a medida, como el de Acal, dijo Aparicio.
La concejala socialista hizo hincapié en las partidas que se repiten, hasta por tercer año consecutivo, a causa de los incumplimiento y fallos de gestión de ZeC, como el parque del Tío Jorge, la reforma del de Torre Ramona o el plan de choque del arbolado. “ A ver si a la tercera va la vencida, dijo. Lo que no evitó que se preguntara si esta manera de proceder no es una burla.
Cuestionó que muchas de las obras se retrasan sine die por el hecho de beneficiar a barrios de mayoría socialista en el cómputo de votos de las pasadas elecciones, y que además están presididos por concejala del PSOE, como el Rabal y Las Fuentes. Pero sobre todo, acusó a Cubero de no saber qué necesita la ciudad por un desconocimiento absoluto de la misma. “Desde el insigne día que fue a contar papeleras a los parques, no ha vuelto a pisar uno”, dijo y se ofreció a acompañarle en una visita a las zonas verdes para conocer qué necesitan, y a las calles “para enseñarle que están mucho más sucias, o para ver las ratas que campan a sus anchas por el entorno del bloque de Andrea Casamayor. Pocas novedades y muy flojas, concluyó.