Las cuentas de 2018 salen adelante porque son aceptables en términos económicos, aunque en un contexto turbulento con un gobierno que actúa de forma unilateral
El presupuesto del Ayuntamiento de Zaragoza para 2018 ya solo precisa la aprobación definitiva en el próximo pleno municipal después de que PSOE, CHA y ZeC hayan unido sus votos en favor de unas cuentas que son “aceptables” en términos económicos, pero que nacen en un contexto turbulento por el asalto al poder que ZeC ha llevado a cabo en las sociedades mercantiles.
El concejal de Economía del PSOE, Javier Trívez, recordó que el borrador de presupuestos, que vio la luz el 10 de noviembre, ya nació torcido porque el Gobierno de ZeC lo aprobó sin contar con el resto de grupos de izquierda. Esta forma inaudita con la que actuó el Gobierno, que le valió el calificativo de la “CUP de Zaragoza”, lejos de corregirse se ha agravado con el golpe de fuerza que ha dado a las sociedades mercantiles, y que ha mostrado sus modos más autocráticos y dictatoriales. “Deja ver la cara, no ya más antisistema, sino la más totalitaria, stalinista y dictatorial de ZeC”, aseguró Trívez.
Sin embargo, pese a este contexto de tensión, el presupuesto es “aceptable en términos económicos”, y cuenta con las mejoras que se han introducido con las enmiendas socialistas que se dirigen a lograr mejoras en la movilidad, en los barrios, en el deporte, además de incrementar las inversiones y las ayudas a la vivienda o contemplar una renovación de la red de tuberías de abastecimiento.
Por eso, los socialistas han vuelto a dar su apoyo a las cuentas de la ciudad, que tratan de que Zaragoza no se quede lastrada por las tensiones que se viven en el Ayuntamiento, pero como reconoció Trívez, los socialistas votan sumidos “en el descontento y la desesperanza, con un Gobierno que actúa a su libres designio”. Trivez concluyó asegurando que el PSOE no va a cejar de trabajar porque vuelva la normalidad democrática al Ayuntamiento.