Zaragoza, 30 de agosto de 2024.- La portavoz socialista, Lola Ranera, ha mostrado hoy su preocupación por lo que ha considerado una “muy mala noticia y un tremendo varapalo para la ciudad”: el anuncio de Becton Dickinson de cancelar la construcción de su fábrica de jeringuillas en Zaragoza.
Ello se traduce en la “fuga” de un proyecto estratégico importantísimo para la ciudad tan solo seis meses después del también abandono de Maersk, algo que que, según Ranera, “se debe a la deriva de un Gobierno inestable y una alcaldesa frívola que hace que las empresas no se fíen de Zaragoza”. Que estas dos empresas abandonen la ciudad conlleva la pérdida de más de 200 millones de euros de inversión y 700 puestos de trabajo, lo que “supone un fracaso estrepitoso” por parte de Chueca, ha lamentado.
En este sentido, el Grupo Municipal Socialista ha registrado hoy la comparecencia de la alcaldesa en el próximo Pleno municipal para que explique los motivos del reiterado abandono de proyectos estratégicos en Zaragoza, así como las consecuencias y las acciones que se van a llevar a cabo para revertir sus efectos.
También desde la Comisión de Urbanismo y Hacienda, los socialistas pedirán las explicaciones oportunas para reclamar las compensaciones económicas que se tendrán que dar a la ciudad tras la fuga de estas empresas. “Tras el abandono ahora de Becton Dickinson ha quedado claro que algunas bonificaciones que se daban en la ciudad, como el 95% del ICIO, no funcionan, a pesar de que Azcón cuando era alcalde nos lo vendió a bombo y platillo. También tenemos muchas dudas de que el suelo se vendiera tan barato (30 euros/m²), así como qué puede traer consigo después de esto y en qué situación se queda el Ayuntamiento”, ha subrayado.
Ranera ha considerado un “verdadero problema” que la fuga de estas empresas esté provocada por “la falta de confianza en el gobierno actual de la ciudad debido a su inestabilidad, a lo que se une tener una alcaldesa sin liderazgo y con un talante frívolo, a la que lo único que le interesa es la foto rápida para colgarla en sus redes, y no lo que le interesa a la ciudad: la inversión y generar empleos”.
“Que los empresarios no se fíen del Gobierno actual, que no miren a la ciudad con las posibilidades y oportunidades que tiene Zaragoza y que acaben fugándose empresas es muy preocupante”, ha incidido.
Para Ranera, la salida de estas dos empresas “seguramente tenga que ver porque tenemos una alcaldesa que no entiende lo que es importante para la ciudad: que es pensar en sus ciudadanos, apostar por proyectos estratégicos y por una ciudad que genere inversión y puestos de trabajos”.
“Seguramente a Lambán, que no se dedicaba a hacerse fotos sino que se dedicaba a poner a Aragón en el punto del aprovechamiento estratégico, no se le hubieran escapado estas empresas, parafraseando a Azcón cuando era alcalde”, ha ironizado.