ZeC ha presentado un voto particular para retirar el 010 de la plantilla y posibilitar que se sigan negociando los presupuestos de 2017. Esta decisión, que supone una auténtica rectificación por parte del alcalde de Zaragoza, Pedro Santisteve, da por buenas las tesis de los socialistas que defendieron la necesidad no mezclar la discusión del servicio telefónico con la aprobación de la plantilla y con la consiguiente votación del presupuesto.
De hecho, esta necesidad de blindar la discusión presupuestaria de otros debates se materializó en un compromiso personal del alcalde Santisteve con el portavoz del PSOE, Carlos Pérez Anadón, y del consejero de Economía, Fernando Rivarés, con el socialista Javier Trívez, aunque finalmente los responsables de ZeC incumplieron su palabra, y los socialistas se vieron forzados a suspender la negociación del presupuesto.
Finalmente Pedro Santisteve rectificaba y retiraba el 010 de la plantilla, justo después de que en la comisión de Servicios Públicos ZeC y PP unieran sus fuerzas para no retirar el 010 de la plantilla, y después de que el presidente accidental de esta comisión, Pablo Híjar, asegurara que no darían un paso atrás ni para tomar impulso.
Javier Trívez entendió que la nueva situación que se creaba con la “cesión” de ZeC y “la vuelta a la cordura” permitirá volver a hablar de cifras, aunque no entendía para qué se había perdido este tiempo.
La jornada había empezado con celebración de la comisión de Servicios Públicos, en la que Marta Aparicio pidió de nuevo la retirada del 010. Aparicio acusó a ZeC de haber querido “ reventar la negociación del presupuesto” con su actitud y de “carecer de un proyecto al servicio del interés general”. ZeC no tiene dos almas dijo, “tiene solo una fundamentalista y que huye del diálogo y de la cesión como de la peste”.
De la misma manera, dejo claro en el debate sobre la municipalización del 010, desarrollado en el curso de una comisión extraordinaria de Servicios Públicos, que los socialistas pusieron tres premisas para apoyar un cambio de modelo: que no fuera más caro, que mejorara el servicio y que los nuevos funcionarios accedieran a la función pública mediante una oposición. “Nada de esto se cumple con el 010”, dijo y añadió que ZeC ha gestionado el proceso para conseguir la gestión pública del servicio telefónico como “una gran mentira”, aseveró.