Consideramos que dejar sin representaciones de ópera al Teatro Principal, y por lo tanto a Zaragoza, supone una clara pérdida del pulso cultural de la ciudad, una afrenta al más histórico coliseo de la ciudad y la evidencia de la imprevisión y de la incapacidad para gestionar que tiene el equipo de Santisteve.
La concejala de Cultura del PSOE, Lola Ranera, destacó la trascendencia de esta mala decisión que aparta la ópera del Principal, ya que la ópera es un evento teatral musicalizado y sólo se puede representar en un teatro, ya que cuenta con las infraestructuras adecuadas, como el foso y los camerinos, mientras que el auditorio es el espacio idóneo para programar música sinfónica.
Ranera, que no sólo ha mostrado su desacuerdo y más absoluto rechazo a la manera de organizar la programación del Principal, considera que las razones que ha dado el gerente del Patronato Municipal de las Artes Escénicas y de la Imagen, Víctor López Carbajales para justificar la renuncia a la programación de ópera durante este año ( falta de personal y problemas técnicos con el foso) son “argumentos de mal pagador”, porque después de un año de gestión “se podrían haber solucionado los problemas de personal, si es que los había, y adoptar otras fórmulas técnicas para poder poner en escena obras operísticas en el Principal”. Ranera añadió que pese a las declaraciones de López Carbajales , el Principal “ ha contado a lo largo de los años con contenido lírico en su oferta anual.
Por eso, la socialista cree que la decisión que ha adoptado el Gobierno de ZeC, y su correspondiente responsable, Fernando Rivarés, expresa “ la falta de sensibilidad cultural” que tiene este Gobierno. Ranera añadió que la primera muestra del poco aprecio que el equipo de Santisteve tiene a la lírica ya lo demostró cuando “prescindió de un plumazo del concurso de canto Montserrat Caballé.”
Aunque los desencuentros que el Gobierno de ZeC mantiene con la cultura tienen muchos más perfiles, la edil socialista afirma que la lírica es una de las disciplinas que “sale peor parada”, y no concibe como el gerente del Patronato de Artes Escénicas y de la Imagen de la quinta ciudad de España “asuma el papelón de justificar que uno de los teatros históricos de España se queda relegado y al margen de la temporada de ópera”. Decir que que la música culta y clásica ya tiene espacio en el Auditorio –añadió– es “una afrenta total”, al Principal, al que condena al ostracismo.
Asimismo mostró su preocupación por la incertidumbre que se ha creado en diferentes compañías, ahora de gira, que ya tenían un preacuerdo para actuar en el Principal y que se pueden ver afectadas y quedar sin espacio a partir de ahora. Por eso, Lola Ranera preguntará en la próxima comisión de Cultura por los proyectos que Rivarés tiene para la ciudad y por los nuevos criterios para distribuir las actuaciones en los escenarios de Zaragoza.