Los socialistas han logrado el apoyo mayoritario para su iniciativa, que incluye instar al Gobierno de ZeC a modificar el Plan General de manera que encaje sin dudas los usos productivos en los suelos de la vieja factoría
Zaragoza, 20 de Marzo de 2019– Un voto particular del PSOE, apoyado mayoritariamente por los grupos municipales, permitirá que el Ayuntamiento recurra en casación la sentencia del outlet de Pikolín, a la vez que insta al Gobierno de ZeC a iniciar la modificación del Plan General para encajar sin ningún tipo de duda los usos productivos en esos suelos industriales.
Previamente a la votación del voto particular, apoyado por Ciudadanos y PP, que deberá ratificarse en Pleno, se desestimó la propuesta del Gobierno de suspender cautelarmente las licencias de obras de varios locales, entre los que se encuentra un restaurante y unos cines, en el mismo ámbito de la vieja factoría, ya que la sentencia no es firme y por lo tanto el plan especial está vigente y, por lo tanto, todos los actos ( como la petición de licencias) que dependen de él.
La necesidad de defender los intereses municipales y de la ciudad estuvieron en el denominador común de los argumentos que sustentaron la decisión de ir en favor de la casación.
La portavoz de Urbanismo del PSOE, Lola Ranera, explicó que la interposición del recurso es una decisión que debe tomar el pleno, como destaca la propia asesoría jurídica del Ayuntamiento, y resaltó la obligación de defender en primer lugar los actos administrativos que adopta el Ayuntamiento además de evitar “el riesgo real” de que una sentencia firme termine “generando daños económicos a la ciudad”, que también es una advertencia de la asesoría jurídica, constató Ranera.
El voto particular incluye además un punto por el que se insta al Gobierno de ZeC a iniciar la modificación del Plan General para solventar la implantación de usos productivos en esa zona de suelos urbanos no consolidados, en el mismo sentido que señala la sentencia de Pikolín del TSJA, que no cuestiona el outlet, pero que se muestra partidaria de organizar esta zona mediante la modificación del PGOU en vez de con un plan especial, pese a que hay precedentes en la ciudad que no generaron dudas al respecto.
Ranera no pasó por alto que este debate que ha impulsado ZeC es el “penúltimo ejercicio de bronca” del Gobierno para maquillar su falta de eficacia y de impulso en la gestión.